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La remota región de arenas petrolíferas de Canadá en el norte de Alberta se ha convertido en un área crítica de COVID-19, lo que interrumpe el trabajo de mantenimiento anual esencial en sus enormes plantas de arenas petrolíferas.
La provincia rica en petróleo de Alberta está luchando contra la tasa más alta de COVID en Canadá mientras el país está lidiando con una tercera ola de la pandemia, y el jueves alcanzó un récord de nuevas infecciones diarias, superando por primera vez las 2.000 por día.
El municipio regional de Wood Buffalo, hogar de las arenas petrolíferas, tiene la tasa más alta de casos activos per cápita en la provincia.
El trabajo de mantenimiento es fundamental para la producción de las arenas petrolíferas de Canadá, que contienen las terceras reservas de crudo más grandes del mundo y producen 3,1 millones de barriles por día, lo que representa aproximadamente las tres cuartas partes de la producción total del país.
Las arenas petrolíferas de Canadá entraron en su temporada de mayor actividad para el mantenimiento anual, lo que trae miles de trabajadores adicionales a los sitios.
Doce plantas de arenas petrolíferas, incluidas Horizon de Canadian Natural Resources Ltd y el proyecto Syncrude, de propiedad mayoritaria de Suncor Energy, están abordando los brotes mientras se encuentran en medio de proyectos de mantenimiento anual que requieren el transporte de trabajadores adicionales desde lugares muy lejanos como el Atlántico de Canadá.
En total, hay 822 casos activos en sitios de arenas petrolíferas, según Alberta Health.
Suncor ha retrasado el mantenimiento en el mejorador U2 (upgrader 2) en el sitio de su planta base al menos un mes para ver si las infecciones disminuyen, dijo Terry Parker, director ejecutivo de Building Trades of Alberta, que representa a 18 sindicatos locales.
"Es una situación muy estresante en este momento que están enfrentando", dijo Parker, y agregó que algunos trabajadores abandonaban las arenas petrolíferas por temor a infectarse. "Los propietarios están tomando las precauciones necesarias y todavía estamos contrayendo esta enfermedad".
Una portavoz de Suncor dijo que la compañía está haciendo ajustes menores a las actividades previas al trabajo y al día a día, pero sigue por buen camino con el mantenimiento planificado.
Syncrude está reduciendo el tamaño de la fuerza laboral de mantenimiento en su sitio debido al brote de COVID-19, dijo Brad Corson, director ejecutivo de Imperial Oil, en una llamada de ganancias el viernes, Imperial posee el 25% de Syncrude.
El proyecto de minería y modernización, que tiene 254 casos activos, aún apunta a finalizar el proceso de recuperación programado para mediados de junio, agregó Corson.
Canadian Natural Resources (CNRL), Suncor y Syncrude dijeron que existen protocolos de seguridad de COVID-19 y han implementado campamentos de prueba y aislamiento rápidos en un intento por frenar el aumento de COVID-19.
Un contratista de la planta Horizon de CNRL, que tiene 328 casos activos, el más alto entre los sitios de arenas petrolíferas, dijo que los trabajadores se someten a pruebas cada cuatro días, pero eso parecía tener poco impacto en el brote.
Alberta tiene más de 21.000 casos activos de COVID, incluidas 632 personas hospitalizadas.
Son unas 8.000 personas las que van a estar en el lugar durante cuatro semanas, eso va a ser muy significativo para el número de contagios.
Los líderes indígenas pidieron esta semana medidas más estrictas para controlar la propagación del virus y acusaron al primer ministro de Alberta, Jason Kenney, de "priorizar las ganancias sobre las vidas" al permitir que los trabajadores infectados vengan a la región.
Gil McGowan, presidente de la Federación Laboral de Alberta, pidió a Kenney que cierre los lugares de trabajo con brotes en toda la provincia, incluidas las arenas bituminosas, para controlar el virus.
"Esta es una receta para infecciones innecesarias y muertes innecesarias", dijo McGowan a Reuters.
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