El dominio de China en el sector de las tierras raras es incuestionable, hasta ahora

Suecia y Estados Unidos son dos aspirantes que podrían hacerse con una parte considerable del mercado en los próximos años.
China sigue siendo una potencia y un gran actor en el comercio mundial de tierras raras, aunque otros países están entrando en el juego con intenciones de tomar parte de ese mercado.